ISSN: 1578-7710

  Artículo especial nº 3
 

 

   REMI está dirigida exclusivamente a profesionales de la salud

Primera página
Organigrama

Política de privacidad
Derechos de copia

Secciones:
Enlaces
Club de lectura
Pautas de actuación
Debates
Casos clínicos
Arte y Medicina

Revista:
REMI 2001, Vol 1
REMI 2002, Vol 2
REMI 2003; Vol 3
REMI 2004; Vol 4
REMI 2005; Vol 5
REMI 2006; Vol 6
REMI 2007; Vol 7
Buscar

 

Auspiciada por la

 

Web Médica Acreditada. Ver más información

 

REMI suscribe los principios del código HON de la Fundación Salud en la Red
REMI suscribe los principios del código HON
Compruébelo aquí

 

 

 

Revista Electrónica de Medicina Intensiva
Art. Especial nº 3. Vol 3 nº 4, abril 2003.
Autor: Jaime Latour Pérez

Arriba ]

Anterior ] Siguiente ]


Unidades de críticos sin o con intensivistas
Un nuevo análisis de la revisión sistemática de Pronovost

  1. Calidad de los estudios originales
  2. Heterogeneidad de los estudios
  3. Exhaustividad de la búsqueda
  4. Análisis de calidad de los estudios
  5. Validez externa
  6. Referencias y enlaces

Quisiera hacer algunas aportaciones al debate sobre la efectividad de la presencia de intensivistas en las unidades de críticos, suscitado por el estudio de  Pronovost et al [1]. Estos comentarios intentan responder a algunas de las críticas que ha recibido el estudio, y se basan, en gran medida, en un re-análisis (*) de sus resultados de mortalidad hospitalaria. Para ordenar la discusión, seguiré el orden de las principales críticas que ha recibido el estudio:

1.- Calidad de los estudios originales

La revisión de Pronovost et al. no se basa en ensayos clínicos con asignación aleatoria sino en estudios quasi-experimentales (pre-post) y en estudios de cohortes paralelas. Como es sabido, la utilización de estos estudios para la evaluación de intervenciones sanitarias plantea serios problemas de validez, en especial por la existencia de sesgo de confusión debido a la desigual distribución de variables pronósticas entre el grupo experimental y control y a la posibilidad de cointervención. Sin embargo, dichos estudios constituyen “la mejor evidencia disponible” para informar decisiones sobre intervenciones organizativas complejas. En estas condiciones, el gestor o  planificador sanitario debe decidir entre utilizar la evidencia aportada por este tipo de estudios o apoyarse solamente en la opinión (y la influencia de los grupos de presión).

El hecho de que sea la única evidencia disponible no quiere decir que sea la única posible. En este punto discrepo de algunos comentarios, realizados desde estas páginas [5] [6], en que se descartan los ensayos con asignación aleatoria para evaluar intervenciones organizativas por razones logísticas o éticas. Dada la naturaleza de la intervención, ésta no se puede asignar de manera aleatoria a nivel de individuo; sin embargo es perfectamente factible hacer una asignación aleatoria por clusters (es decir, un ensayo comunitario), asignando de forma aleatoria la intervención a unas unidades y no a otras. Una intervención de este tipo sería éticamente cuestionable en un país como España donde la mayoría de las unidades son cerradas, pero posiblemente aceptable en determinados entornos sanitarios en los que el modelo de UCI cerrada no está generalizado.

2.- Heterogeneidad de los estudios

En este punto hay que diferenciar entre heterogeneidad cualitativa y cuantitativa. La primera es consustancial a revisiones como la que nos ocupa, en la que se incluyen unidades con diferentes modelos de organización previos (abiertas, semi-abiertas, con un único intensivista-coordinador, etc.), poblaciones diversas de pacientes (unidades médicas, quirúrgicas, pediátricas, subespecializadas), y diferentes tipos de intervención (con mayor o menor grado de presencia de intensivistas). Sobre este punto volveremos más abajo al referirnos a la aplicabilidad de los resultados. Respecto a la heterogeneidad cuantitativa, tal como indican Tenías y Ruiz [7], el análisis de los 15 estudios con datos analizables indica claramente la existencia de heterogeneidad estadística (tabla 1); sin embargo, el gráfico de Galbraith muestra que dicha heterogeneidad se concentra fundamentalmente en 2 estudios con una odds ratio (OR) superior a 1, y ambos muestran la existencia de un claro confounding:

  • En el estudio de Carson et al [8], la mayor mortalidad del grupo experimental (OR= 1,57; IC 95% entre 0,86 y 2,90) se explica por su mayor gravedad (APACHE II: 20,6 ± 8,6) en comparación con la del grupo control (APACHE II: 15,4 ± 8,3).

  • En el estudio de Pollack et al [2], el exceso de mortalidad del grupo experimental (OR cruda 1,33; IC95% entre 1,02 y 1,73) desapareció completamente al ajustar para gravedad (OR ajustada 0,65; IC 95% entre 0,44 y 0,95)

Parece, por tanto, que la heterogeneidad cuantitativa detectada se debe en gran parte al efecto de confusión introducido por la mayor gravedad de los pacientes del grupo experimental en estos 2 estudios. A pesar de ello, y al objeto de hacer un análisis conservador (favorable al grupo control), se mantuvieron dichos estudios en los análisis sucesivos.

Tabla 1: análisis de sensibilidad

Estudios incluidos n p test de heterogeneidad p test de Egger Odds ratio
(IC 95%)*
Todos 15 <0,0001 0,0971 0,67 (0,53 a 0,83)
Excluidos estudios pequeños 11 <0,0001 0,3624 0,73 (0,58 a 0,91)
Excluidos estudios con riesgo de sesgo 9 0,1952 0,5426 0,67 (0,55 a 0,81)
Odds ratio ajustadas

7

0,0735

0,7666

0,51 (0,38 a 0,67)

* Riesgo relativo de mortalidad hospitalaria (método de Der Simonian-Laird)

3.- Exhaustividad

Tenías y Ruiz han señalado, con razón, la existencia de indicios de sesgo de publicación, tanto en el funnel plot como en los test de hipótesis [7]. Sin embargo, el análisis tras excluir los estudios pequeños (con un error estándar superior a 0,4) sigue mostrando diferencias significativas a favor del grupo experimental (tabla 1). Dicho de otra forma, la conclusión de la efectividad de las UCIs con intensivistas es robusta para el “efecto de estudios pequeños”. Es importante señalar que esta estimación de la efectividad de la intervención es probablemente conservadora, ya que excluye a los estudios pequeños (más favorables a la intervención organizativa) al tiempo que mantiene los 2 estudios favorables al grupo control.

4.- Análisis de calidad de los estudios

Tenías y Ruiz [9] han apuntado, asimismo, que Pronovost el al describen la calidad de los estudios pero la ignoran al hacer el análisis. Siguiendo sus orientaciones, este problema se ha abordado de 2 formas:

  • Exclusión de los artículos con probable sesgo de confusión.- Tras excluir los 6 estudios con mayor riesgo de confounding y/o sesgo de tendencia temporal, la medida global de efecto prácticamente no varía. Adicionalmente, desaparecen los indicios de heterogeneidad y de sesgo de publicación (tabla 1).

  • Ponderación de las odds ratios ajustadas.- Siete de los artículos incluidos en el meta-análisis de Pronovost aportaban datos de OR ajustadas a gravedad y de su error estándar. La OR global ajustada calculada a partir de dichos datos fue menor que la OR global calculada a partir de los datos crudos (tabla 1, figura 1).

Figura 1: Meta-análisis [modelo de efectos aleatorios] Odds Ratio ajustadas

5.- Validez externa

Ya se ha comentado que la extrapolación de  los resultados de esta revisión es un tema de difícil abordaje, debido a la heterogeneidad cualitativa de los estudios y a su carácter observacional:

  • En primer lugar, resulta arriesgado decidir sobre la magnitud del efecto en diferentes entornos sanitarios a partir de estudios observacionales. Muchos expertos coinciden en que la estimación global del efecto a partir de este tipo de estudios debe ser considerada con mucha precaución (“no se debe confundir el diamante del meta-análisis con la joya de la corona”), y que lo realmente importante en estos estudios es el análisis de sensibilidad, para explorar la robustez de las conclusiones. En nuestro entorno sanitario, además, la aplicabilidad de los resultados reviste una particularidad insólita, ya que la situación de nuestros hospitales se parecería más a la del grupo experimental que a la del grupo control de los estudios analizados. Desde esta perspectiva, lo que procedería calcular en nuestro medio no es un NNT sino más bien un NNH: cuántas vidas se perderían por pasar del actual modelo organizativo a un modelo de unidades abiertas.
  • Por lo que respecta a la heterogeneidad cualitativa de los estudios, en mi opinión no compromete la validez de las conclusiones. Al contrario, el hecho de que las unidades con alta dependencia de intensivistas mejoren la supervivencia en una gran diversidad de pacientes y entornos, constituye un argumento poderoso a favor de que dicha asociación es causal, y no un simple artefacto.

En resumen, la evidencia disponible, aunque de calidad no óptima, favorece la hipótesis de la efectividad de las unidades de críticos con alta dependencia de intensivistas. La fuerza de la asociación, la consistencia de los resultados y su plausibilidad de los mismos sugieren que dicha asociación es causal. Esperemos que en el alguno de los países donde el modelo de unidades abiertas es el predominante se animen a realizar un ensayo aleatorizado. Entonces tal vez podamos tener, además, evidencia experimental.

Referencias

  1. Pronovost PJ, Angus DC, Dorman T, Robinson KA, Dremsizov TT, Young TL. Physician Staffing Patterns and Clinical Outcomes in Critically Ill Patients: A Systematic Review. JAMA 2002; 288: 2151-2162. [Resumen Medline]
  2. Pollack MM, Cuerdon TT, Patel KM, Ruttimann UE, Getson PR, Levetown M. Impacto of quality-ofcCare factors on pediatric intensive care unit mortality. JAMA;272:941-946. [Resumen Medline]
  3. Rosenfeld BA, Dorman T, Breslow MJ, Pronovost P, Jenckes M, Zhang N, Anderson G, Rubin H. Intensive care unit telemedicine.: alternate paradigm for providing continuous intensivist care. Crit Care Med 2000; 28: 3925-3931. [Resumen Medline]
  4. Baldock G, Foley P, Brett S. The impact of organisational change on outcome in an intensive care unit in the United Kingdom. Intensive Care Med 2001; 27: 865-872. [Resumen Medline]
  5. Palencia E. La importancia decisiva del intensivista para liderar la asistencia del enfermo crítico. Comentario. [REMI 2002; 2 (11): L4]
  6. Galdos P. La especialidad de Medicina Intensiva. Editorial. [REMI 2003; 3 (4): E29]
  7. Tenías JM, Ruiz V. Tipo de facultativo y resultados clínicos de los pacientes atendidos en UCI. Una revisión sistemática. [REMI 2002; 2 (11): L4]
  8. Carson SS, Stocking C, Podsadecki T, Christenson J, Pohlman A, MacRae S, Jordan J, Humphrey H, Siegler M, Hall J. Effects of organizational change in a medical intensive care unit of a teaching hospital: a comparison of ‘open’ and ‘closed’ formats. JAMA 1996; 276: 322-328. [Resumen Medline]
  9. Tenías JM, Ruiz V. Tipo de facultativo y resultados clínicos de los pacientes atendidos en UCI. Una revisión sistemática. Réplica. [REMI 2002; 2 (11): L4]

Metodología: Para este re-análisis se han realizado algunas correcciones en los datos de los artículos originales incluidos en la revisión de Pronovost:

  • El estudio de Pollack et al [2] no ofrece datos exactos de mortalidad hospitalaria, por lo que Pronovost no lo incluye en su meta-análisis. Sin embargo, en dicho estudio la mortalidad hospitalaria tras el alta de UCI es pequeña, y la mortalidad intra-UCI de las unidades con intensivistas es mayor que la de las unidades sin intensivistas. Por todo ello, en este re-análisis se han incluido los datos de mortalidad intra-UCI como un proxy de la mortalidad hospitalaria.
  • Al objeto de minimizar el sesgo de tendencia temporal, en el estudio de Rosenfeld et al. [3] se ha considerado como periodo de referencia (grupo control) al más próximo a la intervención.
  • Se han corregido los errores en los datos de los estudios de Baldock et al [4] y Rosenfeld et al [3].

Jaime Latour Pérez
UCI Hospital General Universitario de Elche
©REMI,
http://remi.uninet.edu. Abril 2003.

Palabras clave: Cuidados Intensivos, Gestión, Sesgo de selección, Heterogeneidad, Conflicto de intereses, Revisión sistemática, Metaanálisis, Metodología.

Busque en REMI con Google:

Envía tu comentario para su publicación


© REMI, http:// remi.uninet.edu 
© REMI-L

 
webmaster: remi@uninet.edu
última modificación: 01/07/2007