Revista Electrónica de Medicina Intensiva
Editorial nº 46. Vol 3 nº 11, noviembre 2003.
Autor: Ricardo Abizanda Campos
http://remi.uninet.edu/2003/11/REMIED46.htm

Mortalidad oculta: un término inadecuado

El artículo de Gordo et al, publicado en Med Clin (Barc) 2003, 121: 241-244, y comentado por JM de Miguel-Yanes (REMI 2003; 3 (11): 678) plantea un interesante problema como es el cómputo, control, posible predicción y formas de disminuir la mortalidad postUCI de los pacientes, que por uno u otro motivo han ingresado en ella (y que en este caso han precisado soporte ventilatorio artificial) y que fallecen en plantas convencionales de hospitalización, dentro del mismo episodio de ingreso y por razones que pueden o no estar (mayoritariamente lo están) en relación con la causa que motivó el ingreso en UCI.

Sin embargo, el motivo que provoca este comentario no es el objetivo del trabajo sino la terminología utilizada.

Ya Miguel-Yanes deja muy claro que el término "mortalidad oculta" es 'autóctono' (sic) y no aparece como tal en el principal motor de búsqueda bibliográfico (MEDLINE).

Si no estoy equivocado, el término fue acuñado por colegas nuestros, de Barcelona, y pretendía describir la mortalidad acontecida tras el alta de UCI, y relacionarla con posibles déficits de atención en plantas convencionales de hospitalización.

Hasta aquí, nada que objetar si no fuera porque desde entonces, el infortunado nombrecito ha tenido mas éxito del merecido y parece que la gracia puede estar en detectar cuántos pacientes fallecen tras el alta de UCI, como si eso fuera la piedra filosofal.

La utilidad de esta contabilización tiene muchos posibles puntos de interés. La calidad de la asistencia ofertada por el centro, la identificación de posibles reingresos (o la negativa a los mismos), la detección de altas precipitadas, y varios más.

Sin embargo, dentro del papel de los indicadores de actividad de una UCI (y me niego a considerar la mortalidad como resultado) la mortalidad siempre ha sido considerada dentro de la misma estancia hospitalaria.

Los que no lo han hecho así, han hecho trampa, si no lo han dejado expresamente clarificado en sus trabajos.

Desde que Knaus y cols. describieron APACHE, todos los intentos de desarrollar índices predictivos (SAPS, MPM-0, OSF, SOFA, y un largo etc.) han considerado la mortalidad HOSPITALARIA como el hecho a predecir. Nunca la mortalidad intraUCI.

Desde esa perspectiva, la mortalidad sólo está oculta para quien no quiere buscarla, ni siquiera encontrarla.

Otra cosa es cómo disminuirla, y qué políticas asistenciales pueden ponerse en marcha para lograr ese objetivo, pero nunca considerar que es algo escondido, que no se ha citado hasta entonces.

Si eso fuera así, algo tan utilizado como la SMR (tasa estandarizada de mortalidad) que es la expresión de efectividad de UCI de más amplia difusión, conduciría a errores mayúsculos.

La siguiente TABLA muestra los resultados asistenciales de nuestro servicio desde 1999, analizados mediante un CMBD de diseño propio. En ella se muestra, por años, el número de pacientes anuales incorporados al CMBD (se descartan los que se han escapado por fichar - siempre menos del 10 %) y la mortalidad intraUCI y hospitalaria. Conforme a la predicción de mortalidad establecida mediante MPM-0 y SAPS-2 se calculan las SMR para cada una de ellas (intraUCI y hospitalaria), y se comprueba que, con independencia de que MPM-0 sobrestima el riesgo de muerte (pero eso ya se sabía), no es lo mismo definir la efectividad de la UCI teniendo en cuenta la mortalidad tras ella, o no teniéndola en cuenta.

Mortalidad estandarizada UCI HGU Castelló (1999-2003)

  1999 2000 2001 2002 2003
(10 meses)
Número de ingresos 889 885 912 987 878
Muertos en UCI 136 142 117 128 112
Muertos post-UCI 177 167 154 142 135
Predicción mortalidad MPM-0 0,24 0,25 0,23 0,23 0,24
Nº Muertos predichos
por MPM-0
213 221 209 227 210
SMR en UCI por MPM-0 0,63 0,64 0,55 0,56 0,53
SMR real por MPM-0 0,83 0,75 0,73 0,62 0,64
SAPS-2 32 ± 15 33 ± 15 31 ± 14 30 ± 15 31 ± 16
Predicción mortalidad SAPS-2 0,18 0,18 0,17 0,17 0,19
Nº Muertos predichos
por SAPS-2
160 159 155 168 167
SMR en UCI por SAPS-2 0,85 0,89 0,75 0,76 0,67
SMR real por SAPS-2 1,1 1,05 0,99 0,84 0,80
 

Las SMR (relación entre mortalidad real observada y predicha) quedan enormemente "beneficiadas" si se consideran solamente los pacientes fallecidos en UCI, y ello conduce a equívocos importantes.

Creo que es el momento de abandonar la denominación de oculta por el riesgo de que la perdamos del todo. Utilicemos "mortalidad tras UCI" o "post UCI". Será mas fácil orientarnos en los motores de búsqueda bibliográficos, induciremos a menos errores, no nos ensalzaremos injustamente, y nos entenderemos mejor con nuestros colegas foráneos que no conocen la expresión, y no la utilizan. Creo que se llama estructuralismo lingüístico a la necesidad de definir constantemente lo que las palabras expresan, y como todos los "ismos" no parece demasiado adecuado.

Ricardo Abizanda Campos
Servei de Medicina Intensiva
Hospital General Universitario Asociado de Castelló
©REMI, http://remi.uninet.edu. Noviembre 2003.

Palabras clave: Mortalidad oculta, Mortalidad en UCI, Mortalidad hospitalaria, Cuidados Intensivos.